La Fuente Q y los Evangelios
Los Evangelios nos explican la vida de Cristo. Se puede hacer una distinción entre los Evangelios Sinópticos: San Mateo, San Marcos y San Lucas. San Juan bebe de otra fuente.
Los Sinópticos usan la fuente Q. una fuente común que aún no se ha descubierto.
San Juan va por otro lado. Es el evangelio más poético y el que más imágenes ha dado, como la del buen pastor que cuida sus ovejas.
También están los evangelios apócrifos, pero estos últimos no están considerados como verdaderos evangelios por la Iglesia.
El canon, o sea, lo que era preciso para ser considerado palabra de Dios, era que estuviera escrito en griego, que procediera de los apóstoles o de algún seguidor de los apóstoles.
Lo del griego tiene su miga, porque por esta norma se nos han escapado un montón de textos en arameo o en hebreo, que, nos habrían explicado mejor el Apocalipsis.
Como contraposición al uso obligatorio del griego, los judíos hicieron justamente lo contrario y así quedaros los dos en empate a estupidez.
Los evangelios están dirigidos a diferentes comunidades. Esto se nota por ejemplo, en la hija de Jairo en la que Jesús dice: Tabita kumi y el evangelista San Marcos explica: que quiere decir niña levántate. Para un judío, la explicación sería absurda porque los judíos hablaban arameo y hebreo.
Los antiguos cristianos se reunían en comunidad y compartían todo. Entre ellos se decidía si el evangelio era canónico o no. No existía el papel, sino el pergamino. Los pergaminos se enrollaban. Y si se consideraba que no era cierto lo que se decía, se borraba y se reutilizaba el pergamino. Este material era muy caro, y, como ahora, no estaba la cosa para desperdiciar dinero.
Los apócrifos están muy de moda desde el libro El Código da Vinci (que es una estupidez muy grande). Por eso está el evangelio de María Magdalena , el de Felipe y otros tantos.
Nos dan los datos de los padres de la Virgen, del nombre de los dos reos con los que crucificaron a Jesús y diferentes historietas más o menos variadas y con alguna intención perversa. Estoy hablando de que se dice que Jesús y María Magdalena estaban casados y mantenían relaciones sexuales.
Como yo ya estoy curada de espantos no hago ni caso pero aún y así hay gente que se lo cree.
Algunos evangelios son gnósticos, que eran una secta dualista que piensa que existe el bien y el mal.
Esos evangelios adaptan sus creencias a los evangelios y las embuten como los chorizos.
San Juan es otra cosa. Es el Evangelio más discutido de todos. Existe un aire poético y dogmático. No se sabe si fue de San Juan o de algún discípulo.
Particularmente es el que más me gusta.
Un saludo en Cristo
PD: A ver si alguno encuentra de una vez la fuente Q
M. CARMEN HERRANZ GIMENO
Catequista en Valencia de la Iglesia Católica.