Mensaje de Navidad del 2023 del Obispo Primado de la Iglesia Episcopal
Mensaje de Navidad del 2023 del obispo primado de la Iglesia Episcopal Michael Curry
Saludos a mi familia de la fe en la Iglesia Episcopal, a todos nuestros amigos ecuménicos e interreligiosos, y a todas las personas de amor y buena voluntad.
En primer lugar quiero agradecerles a todos por sus oraciones y buenos deseos este año, en que he afrontado algunos problemas de salud. Sepan que estoy bien, siguiendo las instrucciones del médico.
También soy cada vez más consciente del poder de los mensajes de Adviento para velar, esperar y escuchar la voz preñada del silencio, como dice una versión de la Biblia. Y a partir de ese velar, esperar y escuchar, seguir la senda de Jesús de Nazaret y su camino del amor, siendo el Espíritu de Dios nuestro ayudador.
Así que permítanme ofrecerles una lectura del Evangelio según Lucas. Ustedes la conocen bien. La profunda verdad que se encierra en la sencilla historia del nacimiento de un bebé. Esa profunda verdad me ha dado fuerzas durante estos 70 años, fuerzas que muchas veces no tuve por mí mismo. Para algunos, puede parecer fantasioso, pero a su manera, señala lo que la Biblia llama esperanza más allá de la esperanza. Y dice:
Y sucedió que, mientras estaban en Belén, se cumplió el tiempo del alumbramiento. Y María dio a luz a su primogénito; lo envolvió en pañales y lo puso en un pesebre, porque no había lugar para ellos en el mesón. En unos campos cercanos había unos pastores que pasaban la noche a la intemperie cuidando sus rebaños. De pronto, se les apareció un ángel del Señor y el resplandor de la gloria de Dios los llenó de luz, de modo que quedaron sobrecogidos de temor. Pero el ángel les dijo: «No tengan miedo, porque vengo a traerles una buena noticia, que será causa de gran alegría para todo el pueblo. En la ciudad de David les ha nacido hoy un Salvador, que es el Mesías, el Señor. Esta será la señal para que lo reconozcan: encontrarán al niño envuelto en pañales y acostado en un pesebre». En aquel mismo instante apareció junto al ángel una multitud de otros ángeles del cielo, que alababan al Señor y decían: «¡Gloria a Dios en las alturas y paz en la tierra a los hombres que gozan de su favor!».
El mensaje del ángel es tan escandaloso y sorprendente ahora como lo fue entonces. Porque en él está insertado el mensaje de Dios en la muerte y resurrección de Jesús: confiar y creer en la invencibilidad del bien a pesar de la realidad titánica del mal, porque Dios es bueno todo el tiempo. Confiar y creer en el poder permanente del amor, de la verdad, del bien y de la justicia cuando la realidad de lo contrario parece tan enorme.
Confiar y creer en el poder permanente del amor, la justicia, la bondad y la compasión, todo porque Dios es amor y autor de todo lo que es verdadero, noble y justo. «No tengan miedo», dice la Escritura, «porque vengo a traerles una buena noticia, que será causa de gran alegría para todo el pueblo. En la ciudad de David les ha nacido hoy un Salvador, que es el Mesías, el Señor. Esta será la señal para que lo reconozcan: encontrarán al niño envuelto en pañales y acostado en un pesebre».
Señor, te pedimos, danos de nuevo esta señal. Danos a los humildes, a los cansados, a los de mucho y poco patrimonio, y a los que no tienen ninguno. A la gente de iglesia, y a los que no han cruzado las puertas rojas durante años o nunca, danos a todos una señal. Danos el quehacer, la vigilancia, el llanto. Danos esa señal de nuevo; como lo hiciste en el siglo I, así también ahora en el XXI. Danos a los que aguardamos, a los fieles, a los apasionados, a los indignos; danos una señal.
El ángel les dijo: «No tengan miedo, porque vengo a traerles una buena noticia, que será causa de gran alegría para todo el pueblo. En la ciudad de David les ha nacido hoy un Salvador, que es el Mesías, el Señor».
En nombre de toda la Iglesia Episcopal, les deseamos a ustedes y a los suyos una Feliz Navidad y un jubiloso año nuevo.
Dios les ama. Dios les bendiga. Que Dios nos sostenga a todos en esas manos todopoderosas de amor. Feliz navidad.
RVDMO. MICHAEL B. CURRY
Obispo Primado de la Iglesia Episcopal
Texto en PDF.