Comunión temprana en la Iglesia Ortodoxa
En la Iglesia Ortodoxa, los niños generalmente (comulgan por primera vez) inmediatamente después de su bautismo. Este acto simboliza la inclusión del niño en la vida de la Iglesia y el alimento espiritual desde temprana edad, permitiéndoles compartir el cuerpo y la sangre de Cristo, aunque aún no comprendan plenamente su significado.
Es una práctica valorada por la ortodoxia como una forma de iniciar a los pequeños en la fe temprana. Esta práctica no existe en la Iglesia Católica. Ello se debe a que los latinos resaltan la importancia de la comprensión y madurez de un niño, creyendo que la primera comunión es un hito importante donde el niño comprende mejor el significado e importancia de este sacramento. Esto difiere de la práctica ortodoxa, que valora la inclusión de los niños desde temprana edad en la participación de los sacramentos.
Fuente: Página Orientalidades.